Un aceite relativamente neutro y, al mismo tiempo, con un fino sabor a cacahuetes. Va bien con ensaladas y verduras crudas. Ideal para asar y hornear, ya que se puede calentar con fuerza, hasta 200 grados. Además, este aceite de cacahuete tiene efectos positivos sobre la piel y el cabello y, por lo tanto, también se utiliza como aceite base para aceites de bienestar.